Test Estrés

¿Qué es el estrés?

Estrés, ¿qué es exactamente?

El estrés es normal. Es la reacción natural del organismo en respuesta a un desafío físico y/o emocional. El estrés puede ser positivo para activar el cuerpo, la mente y la energía de una persona. Se puede definir como la capacidad individual de movilizar cada recurso del organismo para reaccionar rápida y adecuadamente ante cualquier tipo de situación. Sin embargo, si el estrés se prolonga excesivamente, los recursos del organismo se agotan y la persona desarrolla formas perjudiciales o negativas de reacción al estrés.

Cómo reducir el estrés

Muchas personas están afectadas por el estrés. Se estima que el 80% de los problemas de salud, tanto físico como mental, están relacionados con el estrés; 4 de cada 1 personas sufren estrés, ansiedad o depresión; el 20% de los pacientes que acuden a atención primaria muestran un cuadro depresivo o ansioso, y según la Organización Mundial de la Salud, en el año 2030 la depresión será la primera causa de discapacidad en el mundo.

Los 20 Mejores Trucos de Gestión Estrés

Top 20 trucos anti-estrés: Cómo lidiar con el estrés

1) Cuando estés a tope con algo, concrétalo.

En vez de: “¡Qué estrés!” Puedes decir: “¡Estoy muy ocupada porque la fecha de entrega de este trabajo es el viernes y quiero hacerlo muy bien!” O en vez de: “Qué estrés de tarde me espera”, cámbialo por: “Esta tarde va a ser muy agitada porque quiero hacer la compra, llevar al niño a la extraescolar y visitar a mi tía”. "Concretar te ayuda a controlar la situación y así el estrés no se convierte en un estado indefinido e inmodificable, sino en algo derivado de una actividad o situación en la que tú eres la protagonista"

2) Sustituye el: “Tengo que” “Hay que” “Debo de” por “Quiero”.

Por ejemplo: ¿Tienes que ir a trabajar? O ¿quieres ir a trabajar? No hay nadie con una pistola que te obligue a hacer nada, si lo haces, es porque en tu balanza personal, prefieres una opción a otra. No te cargues con el peso de obligaciones ficticias. Recuerda siempre que eres libre.

3) Haz pequeñas pausas en tu jornada.

Saborea ese bombón o esa galleta light o ve al espejo, date un beso y sonríete. Y, preferiblemente al final del día, tomate un descanso obligatorio. Mímate; será bueno para ti y para los que te rodean.

4) Céntrate en lo realmente importante.

¿Qué es lo que dejas que te estrese cada día? Y ¿qué es lo realmente importante de tu vida? No permitas que lo prescindible acapare el tiempo de lo que de verdad te importa.

5) Ríete sin parar

Aumenta a conciencia tus momentos felices, ríete más fuerte. Está demostrado: el buen humor y el talante positivo puede con las tareas más arduas.

6) Comparte tu tiempo

Proponte por lo menos un encuentro por semana con personas que te motivan, que te hacen vibrar y ten cerca a tu familia y amigos. El apoyo social y el afecto son imprescindibles para nuestro bienestar.

7) ¿A qué me apunto?

Piensa en algo que te apasione, que te encante hacer y encuentra por lo menos un hueco a la semana para incluirlo. Probar un restaurante, ir al cine, escribir, apuntarte a esa clase de meditación... Disfruta de tu tiempo libre.

8) No a la indecisión

Acepta lo que no puedes cambiar y para lo que sí puedes: decide en el menor tiempo posible qué camino seguir y ¡a por tu objetivo! La indecisión y la preocupación es la mayor causa de estrés. Actúa y deja de darle vueltas al coco.

9) Cuestión de horarios

Dedica cada día unos minutos para la reflexión. ¿Voy por el camino que quiero ir? ¿Qué me quita la paz? ¿Qué me la da? Puede que en un momento dado te des cuenta de que lo mejor es frenar y cambiar tu dirección vital o simplemente lo que te perturbe sea aterrizar al límite de la puntualidad en tu trabajo o volver tarde a casa, lo cual podrías evitar poniendo una alarma en tu móvil para levantarte quince minutos antes y también para salir del trabajo a tu hora. Y hablando de horarios: proponte en serio irte a una hora a la cama; no merece que pases sueño y todo el día malhumorada por esa serie que no es tan genial y que podrías grabar.

10) A por tu sueño

Hazte un plan de vida y cúmplelo. No lo llenes de actividades superfluas, si no de lo que realmente te enriquezca y con lo que disfrutes. Y una vez hecho el plan, sé tu colaboradora más fiel y eficiente. Ten voluntad y no te falles, si no, perderás confianza en ti y sentirás que la vida te puede en vez de ser tú la protagonista de ella.

11) Levántate tras la caída

Si has hecho algo que no aprueba tu conciencia aprende de ello y procura resarcirlo. Pero no te quedes estancada en los cargos de culpabilidad que te paralizan y te impiden avanzar.

12) No te "estreses"

Nos hemos acostumbrado a utilizar la palabra “estrés” con demasiada frecuencia, lo que hace que nos “estresemos” aún más, ¿Qué tal si la cambias por otras, como: “me siento nerviosa con esto”, o “estoy un poco agobiada”…? Si dices: “¡Qué estrés tengo!” aunque haya o no motivos, tu cerebro siempre busca justificaciones. El lenguaje es un arma poderosa.

13) Muévete amigo mío

Muévete, baila, haz deporte, anda, fluye….y -como por arte de magia- dirás adiós al estrés.

14) Estira la espalda

Estira tu espalda con Pilates. El estrés suele provocar fuertes dolores de espalda y esta técnica puede aliviarlos. "Practicar Pilates ayuda a ser conscientes se nuestro cuerpo y a controlarlo. Además se le da mucha importancia a la columna vertebral y practicando sus ejercicios conseguimos una espalda fuerte y flexible".

15) Vida saludable

Cambia de hábitos. Aumentar la energía es el objetivo principal en épocas de estrés, cansancio, frustración... Por eso debemos seguir a rajatabla, como si fuera un mantra, un estilo de vida saludable, una alimentación adecuada y cuidar con mimo de nuestra belleza. Si llevamos a cabo estas pautas, nuestro bienestar saldrá beneficiado y las ganas de hacer cosas crecerán.

16) Por una piel radiante

Deja que tu piel respire. Otra de las consecuencias directas del estrés es el envejecimiento prematuro de la piel. "Si sientes que tu piel tiene un aspecto apagado, cetrino, cansado, ajado y sensibilizado, es que te está pidiendo a gritos un 'respiro", explican desde el Instituto de Belleza y Medicina Estética. La oxigenoterapia es un protocolo que infunde a la piel una verdadera inyección de vida gracias al aporte de oxígeno puro, que devuelve la energía a las células cansadas de la piel para recuperar su esplendor y juventud. "La piel se muestra jugosa, hidratada y recupera la luz y la claridad. La sensibilidad, rojeces y el tono cetrino desaparecen".

17) Ayuda en momentos difíciles

Refuerzo en positivo. Entre la ansiedad que provocan las subidas y bajadas de la prima de riesgo, los rescates y las cifras de desempleados... Es fácil olvidarse del valor individual y vivir asfixiados por el pesimismo circundante. Con el objetivo de no olvidar los logros valiosos de cada uno a nivel individual nació hace unos meses Lo mejor de mí. "Es una herramienta gratuita recién lanzada por Test-stress.com que quiere ayudar al individuo a tomar conciencia de su pasado, identificar sus capacidades y emplearlas después de manera efectiva", explican en la página web. En definitiva, ayuda para salir a flote en momentos difíciles

18) Escribe un diario

Empieza un diario. Escribir brevemente las cosas positivas que nos han pasado durante el día es un hábito saludable y recomendado por los psicólogos adscritos a la psicología positiva. ¿Y si vamos más allá? "Escribir un diario ayuda, entre otras cosas, a objetivar los problemas y actúa como un muro de contención contra esos pensamientos repetitivos que nos persiguen durante el día. Sólo escribe unas cuantas palabras clave, en lugar de frases completas, para recordar las cosas interesantes que ocurrieran a lo largo del día".

19) Detox, detox

Limpieza general. Si sientes falta de energía, agotamiento, ojeras, piel reseca o acumulación de líquidos y no sabes por qué... prueba con una dieta detox. A veces, la cafeína, demasiado azúcar, comidas procesadas, poco ejercicio y estrés son factores que ralentizan nuestra capacidad natural de eliminación de toxinas. Prueba a energizar tu cuerpo y tu mente con una limpieza general.

20) ¿Estresarte? ¿Para qué?

Y por último, tu vida es mucho más valiosa que el realizar un sinfín de actividades inconscientemente. Cuando vaya llegando a su fin, no pensarás en cuantas veces conseguiste tachar todas las tareas cotidianas de tu agenda.

¿Cómo puedo aprender a relajarme?

La relajación es la base natural de la gestión del estrés. Todo el mundo debe dedicar tiempo diariamente para relajarse, estando bajo estrés, o no.

En mi vida, hay algunas cosas que puedo cambiar y algunas cosas que no puedo cambiar. Voy a fijarme en lo que puedo cambiar. Luego lo cambiaré. Aquí las pautas para gestionar el estrés de manera saludable y las otras emociones fuertes:

Hacer ejercicio

• Caminar recio por 5 minutos cuando siento estrés, enojo o nervios
• Hacer ejercicio seguido (casi todos los días)
• Tratar una forma de ejercicio que trae mucha relajación, como yoga

Comer saludable

• Tomar el tiempo para comer comida saludable
• Beber 6 o más vasos de agua al día
• Evitar comida que no es saludable

Relajar

• Dormir 8 horas cada noche
• Descansar
• Decirme que me siento tranquilo y relajado
• Respirar lento y profundo 10 veces

Hablar con otros o rezar

• Hablar con alguien de confianza lo que siento
• Hablar con el doctor de mi estrés y emociones fuertes
• Meditar o orar

Escribir

• Escribir lo que siento en un diario
• Escribir una carta a alguien de cómo me siento, aun si no lo envío

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